-- Aviso a navegantes --
Anuncio a todas las personas de bien, que visitan tan noble y rancio blog, que es para mi un gustazo, informaros que, "lamentándolo" en el alma, tendré que dejaros por unos días, en esta mi Sevilla Eterna, patas arribas de obras, carriles-bicis, setas de la Encarnación, 42 grados a la sombra, etc..., con todo el dolor de mi corazón, "el guardia la Campana, lo sabe", marcharé a surcar nuevos mundos, nuevas fronteras y nuevas Primaveras, a respirar la fresca brisa marina, a través de las cristalinas y azules aguas del Mare Nostrum, romano, griego, arabesco y bizantino, puerta de tantas civilizaciones, en una aventura, en la que nos escaparemos, allende de los mares, “la parienta y un servidor”. 
Nuestra singladura comienza mañana Lunes en Barcelona, zarparemos "viento en popa a toda vela" hacía la Costa azul o dicho con más glamour: -"Riviera francesa", antes del mediodía del Martes, nos detendremos en Villefranche, visitando posteriormente la ciudad gala de Niza y adentrándonos en el Principado, para llegar a Mónaco y Montecarlo, de allí navegaremos por el Mar de Liguria hacía el puerto italiano de Livorno en el que atracaremos el Miércoles, para visitar las bellísimas ciudades de Pisa y Florencia en pleno corazón de la Toscana.El Jueves alcanzaremos el puerto de Civitavecchia, puerta de entrada a la cosmopolita ciudad de Roma, eterna, imperial y vaticana, cuando nos empapemos bien del sabor de sus gentes, y visitemos sus lugares más emblemáticos, navegaremos a través del Mar Tirreno, rumbo al fértil valle del Vesubio, visitando las ciudad de Nápoles, descubriendo los secretos de la ciudad de Pompeya, enterrada en el 79 a.c. y la archifamosa isla de Capri.
Surcando las aguas mediterráneas, el Sábado, divisaremos la costa africana, haciendo nuestra última escala en Tunez, para descubrir de primera mano las ruinas de Cartago y la Medina de Tunez, fundada hace 13 siglos, perdiéndonos por sus zocos del oro y de los perfumes.
Trás un día de navegación para descansar en el Spa o en el Jacuzzi y beberte un puñao de mojitos y caipirinhas, después de la paliza de los días anteriores, regresaremos a la Ciudad Condal, para decir adiós, a esta emocionante aventura. Ah!!, por cierto, la travesía la haremos a bordo de una “barquita” llamada Souverign que mide la friolera de 268 m de largo (un metro menos que el Titanic) por 32 de ancho y que pesa 73.192 toneladas, "menuo bicho". (Oh¡¡ -Cielos he nombrado la palabra maldita).
Bueno, no me queda más que despedirme amigos y ya sabeis, haced como Super Ratón y no olviden de super vitaminizarse y mineralizarse ¡¡¡, que es mu güeno pa la caló.
P.D. Cuidarme a mis niñas...
Panagarvill
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